El Mundial de Clubes 2025 promete ser uno de los eventos más revolucionarios en la historia del fútbol. Con la participación de 32 equipos de todo el mundo, este torneo organizado por la FIFA se jugará entre el 15 de junio y el 13 de julio en once ciudades de Estados Unidos. El nuevo formato imita el de una Copa del Mundo de selecciones, con una fase de grupos y eliminatorias directas hasta la gran final en el MetLife Stadium de Nueva Jersey.
Entre los clubes clasificados destacan potencias como Real Madrid, Manchester City, Flamengo y León de México. La representación se distribuye entre todas las confederaciones, garantizando un torneo global y competitivo. Además, la FIFA planea utilizar esta edición como un laboratorio de innovación tecnológica, implementando cámaras subjetivas en los árbitros, sensores en el balón y un sistema de VAR mejorado con inteligencia artificial.
El impacto económico también es notable. Se estima que el torneo podría generar hasta 2.000 millones de dólares. DAZN adquirió los derechos de transmisión por mil millones y lo ofrecerá gratis en todo el mundo. El campeón podría recibir hasta 140 millones, una cifra sin precedentes para un torneo de clubes. Sin embargo, algunos partidos han tenido baja asistencia y se han reportado gradas vacías, pese a la reducción de precios.
A pesar del enfoque deportivo, el torneo no ha estado exento de controversia. En ciudades como Los Ángeles se han registrado protestas relacionadas con políticas migratorias, y organizaciones como Amnistía Internacional han señalado un posible intento de “lavado de imagen” a través del deporte. El Mundial de Clubes 2025 no solo será una prueba futbolística, sino también un reflejo del contexto social y político actual.