CONCACAF anunció que ha sancionado al árbitro mexicano Marco Antonio Ortiz Nava por solicitar un autógrafo de Lionel Messi después de la victoria de Inter Miami CF en la Copa de Campeones de CONCACAF sobre Sporting Kansas City el miércoles en el Children’s Mercy Park en Kansas City.
Después de una victoria por 1-0 para los Herons -con el gol de la victoria siendo anotado por el propio argentino-, el árbitro aparentemente se acercó a Messi y le pidió su camiseta. Sin embargo, ahora se ha aclarado que Ortiz Nava en realidad solicitó un autógrafo para un miembro de su familia «con necesidades especiales».
Su acción se consideró en contra del código de conducta para los oficiales de CONCACAF.
«CONCACAF está al tanto de la interacción que ocurrió entre el árbitro Marco Antonio Ortiz Nava y el jugador Lionel Messi inmediatamente después del pitido final del partido de la noche pasada de la Copa de Campeones de CONCACAF entre Sporting Kansas City e Inter Miami CF», dijo un portavoz de CONCACAF a ESPN en un comunicado. «Tras la investigación, CONCACAF ha sabido que el árbitro se acercó al jugador para solicitar un autógrafo para un miembro de la familia con necesidades especiales.»
«La conducta del árbitro no se alinea con el Código de Conducta de la Confederación para los oficiales de partido y los procesos existentes para este tipo de solicitudes. El árbitro ha reconocido su error, se ha disculpado por el incidente y ha aceptado la acción disciplinaria que CONCACAF ha aplicado.»
EL PANORAMA GENERAL
Sporting hizo una declaración, compartiendo que informaron tanto a la MLS como a la CONCACAF de la situación al enterarse.
«Informamos a CONCACAF y a la Major League Soccer sobre el incidente después del partido contra el Inter Miami CF el miércoles. Esperamos una revisión adicional del asunto y la acción que tomará CONCACAF,» dijo el equipo.
CONCACAF no ha revelado los detalles de la sanción.
¿SABÍAS QUE?
El encuentro a media semana de los Herons con el Sporting fue retrasado 24 horas debido a las temperaturas gélidas y bajo cero en Kansas City. Cuando el partido se jugó el miércoles por la noche, la temperatura de inicio fue de cuatro grados Fahrenheit con una sensación térmica de nueve grados bajo cero.
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