El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, aseguró este martes que la entidad está «más fuerte que nunca» y advirtió que «mucho tendrán que trabajar los desestabilizadores de afuera para hacer tambalear una institución que pronto cumplirá 125 años de vida».
«Los ataques continuarán. Cuando volvemos a ir bien, casualmente vuelve a aparecer el caso Negreira. Un caso que no se aguanta por ningún lado», alertó Laporta, que compareció en rueda de prensa, tras el cierre del mercado estival, en el Auditorio 1899.
El máximo dirigente de la entidad azulgrana reivindicó el trabajo que está haciendo la junta directiva para revertir la delicada situación económica del Barça y el de su director deportivo, el portugués Anderson Luis de Souza ‘Deco’, para mejorar la calidad de la plantilla.
«Con Deco, esta temporada se ha reducido la masa salarial y la media de edad de la plantilla y también se ha mejorado su calidad», subrayó sobre el exfutbolista luso, de quien siguió deshaciéndose en elogios.
«Estamos muy satisfechos con el trabajo de Deco. Gracias a él tenemos a Flick (Hansi, el nuevo entrenador). Ha hecho un gran trabajo para renovar a los jóvenes del club y es el artífice de los fichajes de Dani Olmo y Pau Víctor y también de la contratación de los preparadores físicos, una de las claves de este inicio de Liga tan positivo», añadió.
En este sentido, Laporta no quiso confirmar si había habido acuerdo para incorporar al delantero del Athletic Club Nico Williams, pero negó que el fichaje se hubiera frustrado finalmente por las reglas del control financiero la LaLiga.
«Podríamos haber conseguido cumplir con la regla 1-1 este verano. La firma del acuerdo de patrocinio de la camiseta (con Nike) nos permitía inscribir sin tantas dificultades, pero el tempo deportivo no siempre coincide con el tempo económico. Consideramos que no era necesario ni conveniente, que podríamos sacar aún mejor resultado. Será el mejor contrato del mundo del fútbol. Y si hubiéramos tenido que hacer otro esfuerzo en el mercado, los compañeros hubiéramos hecho un aval personal», explicó.
Laporta anunció que, «en breve», presentarán las cuentas del club, que el curso pasado arrojaron «resultados ordinarios positivos», algo que «hacia siete años que no pasaba». Y que se ha alcanzado «un récord histórico en patrocinios y en facturación de BLM (la empresa del club que explota sus tiendas oficiales y la venta de productos bajo licencia)».
Sin embargo, admitió que pese a todas estas mejoras económicas y la reducción de la masa salarial, al Barça aún le faltan «60 millones» para llegar a la regla 1-1 que le permitiría inscribir jugadores con normalidad, algo que espera «conseguir en octubre».
Por eso, Joan Laporta, volvió a hacer un llamamiento a la calma: «Recibimos muchas lecciones desde fuera, pero lo que estamos haciendo es salvar el Barça con el mínimo tiempo posible y sin poner en riesgo nuestro futuro y modelo asociativo. Hemos salido de este callejón sin salida».
Por otro lado, recordó que el Spotify Camp Nou «ya es casi una realidad» y confía en que el primer equipo pueda disputar partidos en el nuevo estadio «a finales de año», aunque con un aforo al 60%.
«Por el hecho de estar en Montjuïc, hemos dejado de ingresar 100 millones de euros. Por tanto, nuestro interés prioritario es volver cuanto antes al Camp Nou», apuntó el presidente del Barça.
Con La Masia como «la base del proyecto deportivo», Laporta destacó la implicación de Flick en la recuperación del equipo: «Le estamos exigiendo trabajo, profesionalidad, que viva el día a día con intensidad y que nos ofrezca un fútbol que nos guste. Estamos coincidiendo en todo. Es un entrenador exigente, pero que no busca excusas y se arregla con lo que tiene».
Menos eufórico se mostró cuando fue preguntado por el proyecto de la Superliga, de la que dijo que «sigue en su estado», aunque matizó que el interés por crear esta competición alternativa «ha ayudado a que la UEFA se mueva con el nuevo formato de la Champions».
«Ahora reparten 500 millones más. Vamos mejorando, pero todo se puede mejorar. Las cifras de la Superliga son mucho más atractivas, pero bienvenido todo lo que sea evolucionar. A mí me ilusiona este nuevo formato y estoy contento que haya más partidos, con partidos interesantes en el estadio», reflexionó.
Además, reconoció que con el Real Madrid, su socio en el proyecto de la Superliga, «las relaciones están mal porque han comparecido en el ‘caso Negreira'».
«Tenemos muchas demandas de falsedades, del orden de una veintena. Que sigan haciendo lo que consideren, que nosotros también haremos lo que consideramos hacer», concluyó.
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