Cual hijo pródigo, el Victoria ha regresado a la Liga Nacional. Este sábado, uno de los exponentes más tradicionales del fútbol hondureño recuperó el puesto había perdido hace cinco años.  Lo hizo con autoridad, haciendo olvidar muchos tropiezos y amarguras que hacen más dulce su regreso.

¡Bienvenida Jaiba Brava!

Un 16 de abril de 2016, el Victoria había perdido la categoría de Primera División que ayer recuperó tras vencer al Atlético Pinares con un global de 5-0.

En realidad, lo de ayer solo era una confirmación. Los jaibos habían comenzado su fiesta en Ocotepeque, cuando venció al Pinares 0-2. El triunfo 3-0 de ayer con goles de Edwin Álvarez, Walter Chávez y Yosimar Maradiaga solamente fue una cereza al pastel.

De la mano de Roberto «Chato» Padilla, Victoria ganó merecidamente su ascenso. Fue un campeón incontestable.

La Liga ha recuperado un hijo perdido y en La Ceiba hay fiesta de los jaibos por el Victoria ha vuelto al lugar que no debió haber perdido.