Más de un millón de aficionados, de todo el mundo, provocarán que Qatar se tenga que ayudar de sus países vecinos para darse abasto en alojamiento y otros servicios durante la Copa del Mundo.

Debido a la alta demanda, se estima que un 40 por ciento de los seguidores que asistan al próximo Mundial tengan la necesidad de buscar alojamiento en países aledaños como Emiratos Árabes Unidos, Omán, Arabia Saudita, Bahréin e incluso Turquía, destinos que figuran como las principales alternativas.

De hecho, se espera que Dubái, Abu Dabi y Mascate sean de las ciudades más activas, fuera de Qatar, durante la Copa del Mundo en cuestión de hospedajes alternativos para los aficionados que disfrutarán del Mundial del 20 de noviembre al 18 de diciembre.

“Es cierto, no todo mundo se va a poder quedar en Qatar, y para ello se adelantaron el gobierno de Qatar y sus líneas aéreas, para ponerse de acuerdo con los países vecinos y construyeron puentes aéreos, en los que, si una persona no encontró hospedaje en Qatar, se van a poder quedar en Emiratos Árabes Unidos, Abu Dabi o Dubái, y de ahí volar diariamente.